
Cancún.-Pequeños hoteles independientes del centro de la ciudad operan a una tercera parte de su capacidad. A diferencia de otros años, en los últimos el fenómeno de las plataformas de renta vacacional y su popularidad amenazan con acabar con los pequeños emprendimientos de la fundación de Cancún.
Juan Carrillo Padilla, consejero vitalicio de la Canaco-Servytur acusa que para los hoteles del centro no se reflejaron estas vacaciones ya que acaso su ocupación fue del 30 por ciento.
A diferencia de otros años no se vieron tours vía autobús, ni carros con placas foráneas, pero hubo una gran actividad y la muestra son los registros de las operaciones aéreas en el Aeropuerto Internacional de Cancún.
La respuesta para el hotelero es muy sencilla, se trata del Airbnb. Enclavados en el centro de la ciudad los pequeños hoteles están rodeados de cientos de casas de rentas vacacionales lo que representa una competencia muy fuerte para la hoteleria establecida la cual paga gran cantidad de impuestos a diferencia de las plataformas.
Sin embargo, el Sistema de Administración Tributaria de Quintanma Roo (SATQ), ya publicó las reglas fiscales que deben seguir los operadores de las plataformas y sus anfitriones en la entidad.
En el caso de los operadores de Airbnb, deben contar con una licencia de funcionamiento y un registro estatal de causantes que los comprometa a pagar el Impuesto al Hospedaje (IAH), deben además, tener su registro ante la autorida fiscal y entregar un padrón actualizado de todos sus anfitriones.
En cifras aproximadas, marcas como Airbnb generan ganancias anuales cercanas a los 400 millones de dólares y hay un aproximado de 45 mil unidades disponibles en la entidad.