
ESTAMBUL — Miles de afganos desesperados que intentaban escapar de la toma del poder de los talibanes invadieron el principal aeropuerto internacional de Kabul el lunes, atravesaron las puertas de embarque, saltaron a las pistas, treparon sobre las alas de los aviones e incluso intentaron aferrarse al fuselaje de las aeronaves militares estadounidenses que partían.
Se calcula que media docena de afganos murieron en el caos, algunos cayeron del cielo cuando tuvieron que soltarse de los aviones, y al menos dos recibieron disparos de soldados estadounidenses que intentaban contener a la multitud.
Las imágenes evocaron la frenética salida de Estados Unidos de Vietnam, y simbolizan el impresionante colapso de Afganistán a raíz de la salida de las tropas estadounidenses.
Mientras los efectivos militares estadounidenses intentaban manejar el éxodo, tomando el control del tráfico aéreo para priorizar los vuelos militares que evacuaron a los ciudadanos occidentales y volando helicópteros Apache a baja altura sobre la multitud para despejar las pistas, los combatientes talibanes coronaron su rápida y devastadora arremetida por el poder posando para una foto icónica detrás de un ornamentado escritorio del palacio presidencial, horas después de que el presidente Ashraf Ghani huyera del país.
En un video transmitido por Al Jazeera, el jefe de la guardia presidencial afgana estrechó la mano de un comandante talibán. “Les doy la bienvenida y los felicito”, dijo el funcionario.
El lunes, los combatientes talibanes se dispersaron por las calles de la capital en motocicletas, vehículos policiales y unidades militares incautadas a las fuerzas de seguridad del gobierno. Combatientes armados ocuparon el Parlamento, algunos visitaron las casas de los funcionarios del gobierno para confiscar posesiones y vehículos, mientras que otros alardeaban dirigiendo el tráfico.
Los funcionarios talibanes les prometieron a los civiles que tendrían seguridad y los instaron a quedarse, pero las turbas en el aeropuerto internacional Hamid Karzai revelaron la profundidad del pánico y la desesperación de los afganos que temen los asesinatos en represalia y un retorno del gobierno draconiano de los talibanes.
“Nuestra situación es amarga”, dijo un hombre afgano que pidió mantener su anonimato por temor a las represalias de los talibanes. En medio de un alboroto de cientos de personas que gritaban y niños llorando, dijo: “No hay agua ni comida. Nos mudamos a otro lugar, pero no estamos seguros de cuándo nos darán un vuelo”.
El lunes en la tarde, el presidente Biden ofreció un discurso desde la Casa Blanca reconociendo que la retirada fue “desordenada”, pero rechazó las comparaciones con Vietnam mientras defendía su decisión de retirarse de Afganistán y culpaba a los líderes militares y políticos afganos por no defenderse después de dos décadas de apoyo estadounidense.
“Los líderes políticos de Afganistán se rindieron y huyeron del país”, dijo. “En todo caso, los acontecimientos de la semana pasada refuerzan que poner fin a la participación militar estadounidense en Afganistán fue la decisión correcta”.
Dijo que había instado a los líderes políticos de Afganistán a participar en una verdadera diplomacia. “Ese consejo fue rechazado rotundamente”, dijo.
Pero las horribles escenas del aeropuerto, que rápidamente circularon por todo el mundo, son más elocuentes que las palabras.
En una escena extraordinaria filmada por los medios afganos, cientos de personas corrían junto a un avión de carga militar estadounidense C-17 y algunos intentaron trepar a los huecos de las ruedas o aferrarse a los costados del avión mientras ganaba velocidad, lo que fue visto como un símbolo de que el poderoso ejército estadounidense se marchaba volando mientras los afganos siguen resistiendo contra toda esperanza.
Un oficial militar estadounidense confirmó que algunos afganos murieron aplastados por el avión durante el despegue o al caer desde las alturas.
Las tropas estadounidenses dispararon fatalmente contra al menos dos hombres armados que se acercaron al perímetro de seguridad del aeropuerto y blandieron armas, según un oficial militar estadounidense.
Un hombre afgano, que estaba esperando con su familia para ser evacuado, dijo que varias personas murieron cuando las tropas estadounidenses abrieron fuego para detener a la creciente multitud. Dijo que vio dos cuerpos en el suelo cubiertos con sábanas pero afirma que al menos tres personas, incluida una mujer, murieron en un incidente sucedido alrededor de las 10 de la mañana, y más gente murió durante un segundo tiroteo.
La escala del caos evidenció lo poco preparada que estaba gran parte de los organismos internacionales con presencia en Afganistán para una victoria de los talibanes. Turquía, que se había ofrecido a mantener tropas para asegurar el aeropuerto después de la retirada estadounidense, indicó que estaba abandonando sus planes el lunes por la noche, informó Reuters.(Con información de nytimes.com)