
El exprocurador fue vinculado a proceso por tortura, desaparición forzada y contra la Administración de Justicia en el caso Ayotzinapa. El juez Marco Antonio Fuerte Tapi determinó que el exprocurador Murillo Karam deberá permanecer en el Reclusorio Norte.La autoridad ratificó la medida de prisión justificada contra el exfuncionario, y dio un plazo de 90 días para el cierre de la investigación complementaria.
Antes, la defensa de Murillo presentó a un experto en medidas cautelares y un estudio sobre riesgos de fuga. En dicho estudio se desprende que no existe riesgo de evasión de la justicia.
Durante la tarde de este miércoles, Karam fue vinculado a proceso por su presunta participación en los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de justicia en el caso Ayotzinapa.
Tras culminar el debate entre la defensa y la Fiscalía General de la República, el exprocurador Jesús Murillo Karam tomó el micrófono para expresar que, a pesar de las investigaciones e intervenciones del grupo interdisciplinario de expertos independientes y el equipo argentino de antropología forense, nadie ha podido tirar la llamada “verdad histórica”.
El exprocurador, con un tono bajo de voz, se dirigió al juez para exponer su punto de vista respecto a las acusaciones en su contra.
“Estos grupos participaron en todo momento en la investigación (del caso Ayotzinapa), fueron ellos quienes escogieron el análisis de los restos, fueron ellos quienes llevaron los restos a Innsbruck (Austria) y trajo los resultados, desde hace siete u ocho años han buscado muchas alternativas y han inventado muchas cosas y todas se caen” expresó.
Murillo aseveró que incluso fueron los expertos quienes escogieron los lugares donde se hicieron las diligencias, como en el basurero y el río de Cocula.
No obstante, el exprocurador admitió que durante su gestión al frente de la PGR pudieron existir fallas: “Pudieron cometerse fallas, problemas, y aceptar que muchas cosas se hicieron mal e, incluso, lo pude haber hecho mejor”, exclamó.
En la continuación de la audiencia inicial, la defensa de Murillo Karam buscó desestimar los datos de prueba que presentó la FGR para intentar la vinculación a proceso del exprocurador por los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de la justicia.
Los abogados del exfuncionario de Enrique Peña Nieto intentan que el juez desestime las conferencias de prensa que la Fiscalía General de la República (FGR) presentó para acusar a su cliente:
-La 6 de octubre, cuando la PGR anunció la atracción del caso Ayotzinapa-
-La reunión del 7 de octubre en Iguala, donde estuvieron presentes altos mandos de distintas corporaciones. La defensa argumentó que esta reunión solo fue para conocer la carpeta de investigación que en ese momento estaba en poder de la Fiscalía de Guerrero, por ello –indican– en la reunión estuvo el exgobernador Ángel Aguirre.
-La del 27 de octubre, donde el exprocurador supuestamente giró instrucciones a Tomas Zeron de Lucio para que aplique toda la fuerza del estado. En este caso, la defensa argumentó que era imposible que se pudiera girar una instrucción oficial ante medios nacionales e internacionales presentes en el recinto de la PGR
-La conferencia del 7 de noviembre, donde se mencionó la palabra “verdad histórica: aquí la defensa señaló que esta palabra no es una frase hecha, sino un concepto jurídico utilizado en el derecho, el cual fue reconocido por la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), por tanto -argumentan– esta conferencia no puede ser tomada como una prueba como lo busca poner sobre la mesa la FGR.
En esta ocasión, se encuentra presente en la audiencia Vidulfo Rosales, como parte de la defensa de los padres de los normalistas de Ayotzinapa.